Una tarde fría de invierno, un anciano solitario, llamado Eusebio, decidió ir al café de su barrio. Allí se puso a reflexionar sobre como había desperdiciado su juventud. A pensar que había hecho mal para acabar solo, en aquellos impulsos que contuvo, en todas la oportunidades que perdió.Ya es demasiado tarde para arrepentirse, él sabe que le queda poco tiempo que vivir. Después de tanto reflexionar y pensar, el anciano cae en un sueño del que ya nunca despertará.
Yolanda Cano
2º PCPI
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